Todos dependemos de
los arrecifes.
Los arrecifes de coral representan menos del 1% de todo el océano. Pero el 25% de toda la vida marina depende de ellos.
¿QUÉ SON LOS CORALES?
Los corales pueden parecer plantas submarinas, pero en realidad son animales, estrechamente relacionados con las medusas y las anémonas. Con fósiles que datan del período Cabriano, hace 500 millones de años, son una de las especies animales más antiguas del planeta.
Se pueden dividir en 2 categorías:
Los corales duros tienen un exoesqueleto de carbonato de calcio, que les da un aspecto sólido y similar a una roca.
Los corales blandos que no tienen exoesqueleto parecen más fluidos y parecidos a plantas.
Ambos están formados por miles de criaturas coralinas individuales, llamadas pólipos, que crecen juntos para formar colonias. Los pólipos individuales son extremadamente pequeños: en promedio, hay 10.000 de ellos en cada metro cuadrado de coral. También crecen lentamente, a una media de tan solo 0,3 a 2 cm al año.
Los pólipos son naturalmente transparentes. Su color proviene de las microalgas (zooxantelas) que viven en simbiosis con el tejido del coral. Las zooxantelas producen alimento mediante la fotosíntesis a partir de la luz solar y lo comparten con el coral.
Los corales ofrecen a las zooxantelas un hogar protegido y les suministran dióxido de carbono y otros productos de desecho que las algas necesitan para la fotosíntesis.
EL ARRECIFE MESOAMERICANO
El Arrecife Mesoamericano, la segunda barrera de arrecife más grande del planeta, se extiende a lo largo de 965 kilómetros a lo largo de las costas de México, Belice, Guatemala y Honduras. Es un punto de gran biodiversidad, hogar de más de 500 especies de peces, 60 tipos de corales y tortugas marinas en peligro de extinción. Los arrecifes de Cozumel son parte de este sistema más grande.
Los arrecifes se han formado a lo largo de millones de años a partir de colonias de coral individuales que han ido creciendo lentamente, capa tras capa, y sus duros esqueletos han creado intrincadas estructuras que proporcionan refugio a una gran variedad de vida marina. Esto constituye la base del ecosistema de arrecife.
Los arrecifes de coral también desempeñan un papel fundamental en la geología única de la península de Yucatán. Durante millones de años, innumerables esqueletos de coral se han comprimido hasta formar "caliza coralina", formando el lecho rocoso tanto de Cozumel como de la propia península. Esta caliza porosa se disuelve fácilmente con el agua de lluvia, que es ligeramente ácida. Con el tiempo, esto ha creado una red de ríos subterráneos, cavernas y sumideros conocidos como cenotes. Esta base de piedra caliza crea espectaculares acantilados y salientes submarinos, que proporcionan diversos hábitats para una variedad de especies de coral con diferentes necesidades de luz solar. Como resultado, Cozumel cuenta con uno de los ecosistemas de arrecifes más diversos y vibrantes del mundo.
LOS ARRECIFES SON HÁBITATS DE ANIMALES
Los arrecifes de coral son como bulliciosas ciudades submarinas que brindan un refugio vital para una gran variedad de vida marina. Sus intrincadas estructuras crean un laberinto de cuevas, grietas y salientes donde los peces pueden evadir a los depredadores, buscar un respiro de las corrientes y descansar. Los peces jóvenes, especialmente vulnerables, encuentran refugio dentro del abrazo protector del coral, lo que aumenta sus posibilidades de supervivencia.
Pero no son solo los peces los que se benefician. Los cangrejos, las langostas y los pulpos utilizan los rincones y grietas del arrecife para protegerse y camuflarse, para tender emboscadas a sus presas y criar a sus crías.
Los arrecifes de coral son más que simples refugios: son jardines submarinos que sustentan una rica diversidad de vida. Esta biodiversidad atrae a depredadores más grandes, lo que enriquece aún más el ecosistema. La pérdida de los arrecifes de coral tendría consecuencias devastadoras para el delicado equilibrio de nuestros océanos.
LOS HUMANOS TAMBIÉN NECESITAN DE LOS ARRECIFES DE CORAL
Los arrecifes que rodean Cozumel han servido de sustento y protección a los habitantes de la isla desde la llegada de los primeros seres humanos. Los mayas dependían en gran medida de los peces marinos como parte fundamental de su dieta y economía. Los hallazgos arqueológicos en Cozumel han revelado espinas de pescado, anzuelos y otros instrumentos de pesca en antiguos asentamientos mayas, lo que indica la importancia de la pesca en su vida diaria.
Las formaciones de piedra caliza y coral protegen a la isla de tormentas y tsunamis, a la vez que proporcionan ricos caladeros que históricamente alimentaban a gran parte de la isla. Hoy en día, la mayor parte de la industria de la isla gira en torno al turismo, con buceadores y practicantes de esnórquel que exploran el arrecife.
También se ha descubierto que los corales producen sustancias químicas que pueden utilizarse en medicina para tratar el cáncer, la artritis, las infecciones bacterianas humanas, la enfermedad de Alzheimer y las enfermedades cardíacas.